No consigo hacerme a la idea de las cosas que suenan a desastre.
No consigo vencerme.
Así que gano yo.No consigo sentirme menos afortunado.
No consigo dejar de visitar buenos regalos.
Ni caer en la rutina, ni enfadarme sin medida, ni cabrearme por recuerdos.
Ni dejar un libro abierto.
Ya que ahora veo mejor y el miedo no me marea,
me permito pedirle un deseo a cierta estrella...
Sin decirlo me aseguro que se cumpla.
Sin asegurarme de tener un par de alas.
Sin volar cuando hace viento.
Haciendo caso de quién sabe qué cuento.
Saltando entre acantilados abiertos.
Y aun así, ganando yo.
miércoles, 5 de marzo de 2008
porquemedaporahi
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4 comentarios:
me gusta, me gusta mucho...ganando yo.
Besos.
hago lo mismo que la segunda foto. Cojo cosas virtualmente.
Me encanta tu positivismo!
Un besote guapo! ;)
¿Qué tal por London?
Eso está bien...pero no te acostumbres...
A veces, una buena derrota hace que una nueva victoria sepa a cien sabores... no porque no existieran antes en ella, sinó porqué no nos paramos a masticarla bien.
Aunque, tengo la sensación de que escribes hablando de como conviertes tus propias derrotas en algo bueno...en "victorias particulares"...
Eso tambien lo comparto...
Luisín... un beso enorme.
M.
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