sábado, 28 de julio de 2007

maLLorca surreaLista '07 II:

Iba un día un niño pequeñito por una calle pequeñita. Aquel gran boulevard parecía repleto de gente rara. Conforme avanzaba por la calle, todo el mundo se giraba para mirar al niño. Pobre del niño, que siempre terminaba agachando la cabeza. Se preguntaba, ¿por qué me mira esta gente tan rara? A lo que sus zapatos contestaban: sonríe a la gente rara.
Así que el niño sonrió a una señora apresurada, a un matrimonio bien vestido, a un vendedor y sus clientes, a dos trajeados empresarios y a dos chavales y su perro.
Sigue andando, y al final de la calle ve un charco. Corriendo se acercó y saltó sobre él. Cuál fue su sorpresa al mirar hacia abajo, el niño ya no es niño, y no lleva zapatos.
Levanta la vista y la gente pasa al lado. Nadie le mira, ya nadie le hace caso. Y por primera vez en todos esos años, se preguntó si le obligaban a sonreír sus zapatos.
[escrito en Mallorca, en "El Clandestino", por Fernan y yo
foto: Raul en "El Clandestino", pidiendo "la última" ronda]

1 comentario:

Anónimo dijo...

que xulo tu cuentooooo!
bsotes!!!